10/26/2012

Cuando tu hijo o hija no comparte tus tendencias sexuales parte 1




Como padres, siempre tenemos ideas de cómo será la vida de nuestros hijos, tenemos sueños frustrados que queremos vivir por medio de nuestros hijos y nos hacemos también expectativas de lo que esperamos que hagan o sean nuestras criaturas. Esto nos pasa a todos los padres, pero que pasa cuando las tendencias sexuales de nuestros hijos no van acorde con nuestras creencias o expectativas?


Sobre todas las cosas, lo más importante como padres es estar dispuestos a amar y escuchar a nuestros hijos con el corazón. Para muchos padres es sumamente difícil y puede verse hasta imposible entender que su hijo o hija no sea heterosexual. Hay que entender que tanto el hijo como los padres experimentan diferentes facetas antes de llegar a la aceptación absoluta sobre su sexualidad, algunos nunca llegan a esta última faceta pero aprenden a vivir con la realidad. Es decir, tienen que confrontar la nueva situación de ser padres de una hija o hijo homosexual o bisexual.
En el caso de los padres, estos pasan  por distintas facetas de un proceso, cuya forma y rapidez dependerá del modo usual de superación de conflictos en sus vidas. Cuanto menos expectativas tengan los padres de sus hijos en esta área, más fácilmente les resultará aceptarlos simplemente como son. Son pocos los padres que tienen la suerte  o la mente abierta de poder adaptarse  rápidamente a la idea de que sus hijos no cumplen con los modelos existentes. Generalmente viven la confesión en forma completamente inesperada, o sólo uno, la madre o el padre, se entera y acepta. Aunque es un tema profundo y difícil para muchos padres, es sumamente importante que su hijo o hija tenga al menos el apoyo de uno de sus progenitores o guardián legal, esto podría evitar el alejamiento completo de su hijo y podría evitar las posibilidades de algo realmente grave como la depresión, las drogas, el alcohol, la promiscuidad e incluso los pensamientos de suicidio. Los padres deben poner en perspectiva, en balanza y decidir qué les importa más: su propio hijo y su corazón y unión a la familia, o el cumplimiento de la norma social de que los varones no pueden desear y amar a varones, y mujeres no pueden desear y amar a mujeres. Ante esta disyuntiva, la mayoría de los padres, guiados por sus sentimientos y luego de haberse informado y buscado ayuda, se deciden por sus hijos. Entonces van creciendo la comprensión y aceptación, que, junto con la demostración de un renovado afecto preparan la base para un diálogo sobre las diferentes expectativas. De este modo, paulatinamente se irán desprendiendo de los propios deseos proyectados y hasta por que no, los prejuicios e ideas pre-concebidas sobre este tema que ahora se vive en carne propia.

Antes de llegar a este punto, los padres necesitan primeramente sentarse con su hijo o hija y estar verdaderamente dispuestos a escuchar a su hij@ y saber que cabe la posibilidad de que lo que su hijo tenga que decir, no sea de su agrado o no vaya de acuerdo con su forma de pensar o creer. Por otra parte los padres de un hijo o hija homosexual o bisexual tienen que tener claro que esta noticia sobre su hij@, NO es una venganza hacia usted como padre o es algo que usted hizo mal durante los anos de crecimiento de su hijo. Son tendencias que su hij@ ha tenido aun antes de entender el significado de sus tendencias. Si es una etapa de exploración  definitivamente pasara, pero si su orientación es real, no habrá nada ni nadie que lo haga cambiar y reprimir o suprimir este sentir, sera decisión  solo de su hijo o hija.
Esto no se trata de un ataque personal hacia usted,  ni usted o alguien externo a usted cambio a su hij@, pero el pensar de esta forma es parte natural del proceso cuando, los padres tienen expectativas y creencias muy diferentes para su hijo o hija. Puede que sea solo etapas de exploración, si es que realmente esta confundido, pero no es lo usual.

Otro punto importante es ir por encima de sus expectativas con relación a la sexualidad de su hij@ y dar paso a un dialogo profundo y paciente donde entonces el preguntar y responder suele ser un proceso mutuo de educación. Cuando los padres están dispuestos a escuchar, a interiorizarse de los problemas de sus hijos, a dar su opinión aceptando, además, que sus hijos se comporten de modo diferente, ambas partes aprenden. En este caso, la iniciativa partiría tanto de los padres como de los hijos, sin que nadie se sienta investigado o presionado.
También la pregunta sobre la orientación sexual podría formar parte de las conversaciones. Siempre habrá oportunidades. Los juegos infantiles de los roles varón-mujer bien pueden acompañarse con una observación de que también es posible el amor y la convivencia entre mujeres o entre varones.
Casi todos los niños y las niñas aprenden los términos gay y lesbiana en forma despectiva, apareciendo la curiosidad sobre su verdadero significado. Sin duda, la opinión de los padres puede ser significativa. Aunque no puedan borrar el concepto negativo predominante respecto a la homosexualidad, es posible, mediante conversaciones objetivas y abiertas, lograr que las personas jóvenes lleguen a reflexionar y aun usted como padre pueda cambiar la percepción que tiene o ha tenido toda su vida sobre las diferentes tendencias sexuales que siempre han formado parte de nuestro mundo pero que solo hasta hace pocas décadas ha sido mas fácil en términos sociales o a cuanto a “salir del closet” se refiere.


2 comentarios:

  1. para mi seria dificil aceptar que mi hijo o hija tuviera tendencias homosexuales, pero por encima de todo es mi criatura y lo amare no importa que. lo unico que deseamos los padres es que nuestros hijos sean felices y sean buenas personas. asi que esto seria solo una prueba ,mas de que tan incondicional es el amor de padre o madre realemte.

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  2. Nosotros como padres somos quienes nos hacemos ideas en la cabeza de quienes y que seran nuestros hijos, de que haran cuando grandes y sonamos con matriminios, nietos... ect. Somos a veces nosotros mismos los que nos pre juiciamos haciendonos idiologias de una vida que no es la nuestra y gritamos cuando esa vida no va de acuerdo con lo que queremos para ellos. Lo unico que debemos hacer es criarlos con mucho amor, comunicacion de verdad y saber escuchar aun cuando no hay palabras, si no solo acciones. hay que amar y amar plenamente. la sexualidad de cada cual es de cada cual y no debe interponerse en las relaciones, mucho menos de padres e hijos. Buen articulo Kiki! sigue asi.

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