Esta es una historia que compartió conmigo alguien muy especial. Llevaban mas de una década de casados, vivían muy felices y enamorados. Para ambos es su segundo matrimonio y los dos traían hijos de la primera relación. Les presento a Clara y su historia.
Mi esposo no reconoce mi percepción de que mi relación con mi hijastra es cordial pero superficial, no existe una relación de respeto y desde que comenzó la adolescencia todo empeoro. Es una nina muy rebelde, sin limites y muy altanera. Pensábamos que las cosas con el tiempo mejorarían y por el amor que nos tenemos, nos dimos otra oportunidad. Pero lo que estoy viviendo ahora es hostilidad constante, manipulación de parte de ella a su padre, lo que el no logra comprender. Yo, aunque es mi techo, soy como cero a la izquierda ante ella. No sigue las reglas cada cual tiene diferentes reglas y se le propuso terapia familiar. Nada de esto ha resultado y mi relación matrimonial esta deteriorándose. Le puse un ultimátum o se va ella o me voy yo. Que hagoooo???
Mi querida Clara, vamos por partes. Para empezar cuando se forma la segunda familia, sus miembros no tienen un historial en común o una misma forma de hacer las cosas. Creencias y hábitos pueden ser muy diferentes. Estas son algunas de las cosas que tienen que crear como nueva familia, nuevas reglas y hábitos que apliquen a todos. Como pareja tienen que tener muy claro que ante todos los hijos del hogar osea (los tuyos, los míos y los nuestros) deben ser un frente unido y sin favoritismo alguno. Si no se muestra la unión como pareja, los ninos podrían agarrarse de esa debilidad y hacerles la vida de cuadritos. Hay que entender que el hijastro puede tener una lealtad dividida entre padres y padrastros por lo que hace una barrera invisible para cualquier relación cercana que se quiera obtener con ellos.
Me parece que la idea de ir a terapia familiar tanto como individual es una de las mejores opciones que existe para este tipo de situaciones. Ahora con relación al esposo, el debería tener claro que aunque son sus hijos, su mayor responsabilidad es hacerte respetar en todo momento y hacerles saber que son un equipo y que ambos tienen el mismo derecho de hacer respetar las reglas del hogar. Por otra parte has puesto a tu pareja entre la espada y la pared, para un padre que ni si quiera se ha dado cuenta que esta siendo manipulado, le sera muy difícil la desicion, pero si su relación es fuerte y el confía en ti, sabrá tomar los pasos necesarios para que su relación no se siga perjudicando. Es importante que tu pareja sepa y sienta que no es que te quieras deshacer de su hija, si no que quieres que por su propio bien cambie y se ajuste a las reglas del hogar porque a la larga, la vida esta llena de reglas y si no se ajusta en la casa no se ajustara bien a la sociedad tampoco. Teniendo adolescentes en la casa, es natural la etapa de la rebeldía y el sentimiento de "nadie me quiere y nadie me entiende". Entonces hay que ver si es algo pasajero o algo que si no te ajusta a tiempo puede llegar a situaciones mas peligrosas o graves. Bueno Amiga, espero haber podido ayudar en algo. No tires la toalla, pon en balanza tu relación con tu pareja y la situación con la hijastra. No le dejes ganar esta batalla. Tu mereces seguir siendo feliz y su hijita en común merece esta oportunidad de tenerlos juntos.
Mi esposo no reconoce mi percepción de que mi relación con mi hijastra es cordial pero superficial, no existe una relación de respeto y desde que comenzó la adolescencia todo empeoro. Es una nina muy rebelde, sin limites y muy altanera. Pensábamos que las cosas con el tiempo mejorarían y por el amor que nos tenemos, nos dimos otra oportunidad. Pero lo que estoy viviendo ahora es hostilidad constante, manipulación de parte de ella a su padre, lo que el no logra comprender. Yo, aunque es mi techo, soy como cero a la izquierda ante ella. No sigue las reglas cada cual tiene diferentes reglas y se le propuso terapia familiar. Nada de esto ha resultado y mi relación matrimonial esta deteriorándose. Le puse un ultimátum o se va ella o me voy yo. Que hagoooo???
Mi querida Clara, vamos por partes. Para empezar cuando se forma la segunda familia, sus miembros no tienen un historial en común o una misma forma de hacer las cosas. Creencias y hábitos pueden ser muy diferentes. Estas son algunas de las cosas que tienen que crear como nueva familia, nuevas reglas y hábitos que apliquen a todos. Como pareja tienen que tener muy claro que ante todos los hijos del hogar osea (los tuyos, los míos y los nuestros) deben ser un frente unido y sin favoritismo alguno. Si no se muestra la unión como pareja, los ninos podrían agarrarse de esa debilidad y hacerles la vida de cuadritos. Hay que entender que el hijastro puede tener una lealtad dividida entre padres y padrastros por lo que hace una barrera invisible para cualquier relación cercana que se quiera obtener con ellos.
Me parece que la idea de ir a terapia familiar tanto como individual es una de las mejores opciones que existe para este tipo de situaciones. Ahora con relación al esposo, el debería tener claro que aunque son sus hijos, su mayor responsabilidad es hacerte respetar en todo momento y hacerles saber que son un equipo y que ambos tienen el mismo derecho de hacer respetar las reglas del hogar. Por otra parte has puesto a tu pareja entre la espada y la pared, para un padre que ni si quiera se ha dado cuenta que esta siendo manipulado, le sera muy difícil la desicion, pero si su relación es fuerte y el confía en ti, sabrá tomar los pasos necesarios para que su relación no se siga perjudicando. Es importante que tu pareja sepa y sienta que no es que te quieras deshacer de su hija, si no que quieres que por su propio bien cambie y se ajuste a las reglas del hogar porque a la larga, la vida esta llena de reglas y si no se ajusta en la casa no se ajustara bien a la sociedad tampoco. Teniendo adolescentes en la casa, es natural la etapa de la rebeldía y el sentimiento de "nadie me quiere y nadie me entiende". Entonces hay que ver si es algo pasajero o algo que si no te ajusta a tiempo puede llegar a situaciones mas peligrosas o graves. Bueno Amiga, espero haber podido ayudar en algo. No tires la toalla, pon en balanza tu relación con tu pareja y la situación con la hijastra. No le dejes ganar esta batalla. Tu mereces seguir siendo feliz y su hijita en común merece esta oportunidad de tenerlos juntos.